Leía este lunes un suelto publicado en el Santero de El Mundo-Diario de Soria en el que, como conclusión, se hacía una pregunta. El citado comentario decía: “El Ayuntamiento de Olvega decidió el año pasado suspender la matanza debido a la crisis. Sin embargo, este año ha decidido recuperar el acto que ayer congregó a cientos de vecinos. Parece que la crisis ya ha pasado o ¿será que es un año electoral?”.
Trataré de dar respuesta a esta pregunta que, con ironía, plantean desde el periódico, puesto que ya la sabemos todos. Para contestarla, explicaré que en Ólvega seguimos en crisis, como el año anterior, motivo por el cual no se celebraron estas “tradicionales matanzas”.
Llevo demasiados años en el ayuntamiento advirtiendo que debemos tener un control del gasto, puesto que año tras año no logramos hacer cuadrar ingresos corrientes y gastos corrientes. En pocas palabras, gastamos bastante más de lo que ingresamos, lo que hace que la situación del ayuntamiento de Ólvega sea deficitaria año tras año.
Los ingresos corrientes del ayuntamiento superan los 2,3 millones de euros. El gasto corriente, el día a día de Ólvega, es notablemente superior.
A esta situación hay que añadir que durante el periodo 2003/2007 se enajenó prácticamente todo el patrimonio municipal existente para poder financiar otros proyectos. Después de vendido el patrimonio ya no queda nada que vender para obtener liquidez. Por eso, el ayuntamiento acudió a la financiación exterior a base de créditos, con diversas entidades privadas y públicas, lo que hace que la deuda de este municipio a día de hoy sea de cerca de 5,4 millones de euros. Para el ejercicio 2011, los intereses que pagaremos serán de 120.000 €. Dense cuenta de que no hablo de amortizar lo que debemos. Hablo de pagar intereses por lo que debemos. (Este punto lo explicaré otro día con más detalle).
Como pueden observar la situación es más que preocupante:
- Déficit en la compensación de ingresos y gastos.
- Desaparición del patrimonio municipal. Fue enajenado para financiar otros proyectos, vamos, se vendió todo.
- Deuda mastodóntica en comparación con la capacidad del municipio, que impide que seamos capaces de amortizar.
- Alto coste de los intereses de esta deuda.
Como pueden observar la “crisis” sigue y está instalada para quedarse mucho, mucho tiempo con nosotros. Esta “Ólvega a 100 años” tardaremos otros tantos en pagarla. Los “milagros económicos” vamos a comprobar que salen caros.
Así que, contestando a la pregunta que hacia el periódico, “Parece que la crisis ya ha pasado o ¿será que es un año electoral?” debo de contestar que PROBABLEMENTE LO SEGUNDO.